Comunicado Sociedades Científicas

Los programas de vacunación alrededor del mundo han ayudado a mejorar la salud general de la población mediante la reducción de la transmisión de enfermedades, de discapacidades temporales o permanentes y de mortalidad.

A pesar de la numerosa y sólida evidencia científica que demuestra que las vacunas son efectivas y seguras, hay muchos mitos, temores y desinformación que suelen llevar a que estén esporádicamente en el centro de la polémica, y lo que es peor, desincentivan la vacunación, que es la principal herramienta de prevención y reducción del riesgo de complicaciones graves y mortalidad por enfermedades infectocontagiosas.

Las vacunas estacionales contra la influenza y el COVID son un método efectivo de prevención, al estimular al sistema inmune para generar defensas similares a las que se producirían frente a la infección natural. No causan la enfermedad y pueden prevenirla. Sin embargo, la principal función de éstas es evitar la enfermedad como tal, atenuando sus síntomas y reduciendo el riesgo de complicaciones severas y mortalidad. Tras la inoculación pueden presentarse síntomas que generalmente son leves, temporales y poco frecuentes (por ejemplo, dolor en el sitio de aplicación, fiebre, cefalea, malestar general).

Es importante recalcar que las vacunas son seguras, no contienen productos tóxicos, chips ni metales pesados dañinos para la salud. En la actualidad se producen en frascos de dosis única, y la mayoría no requiere el uso de metales en su producción. Si se agregan, se usa el timerosal o aluminio, que no causan daño a la salud y en dosis tan bajas que son menores a lo que estamos expuestos día a día en nuestro entorno natural.

Al igual que cualquier fármaco pueden producir efectos adversos, que son muy poco frecuentes. El beneficio de la vacunación contra la Influenza y el COVID supera ampliamente a los riesgos de padecer la enfermedad, lo que es especialmente importante considerar en niños, personas de cualquier edad con enfermedades crónicas, adultos mayores y embarazadas, grupos con mayor riesgo de mortalidad frente a una evolución severa de la enfermedad. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la inmunización gracias a las vacunas permite evitar de 2 a 3 millones de muertes cada año.

Las Sociedades Científicas nos sumamos al llamado a vacunarse contra la Influenza y el COVID efectuado por las autoridades de salud.

Asociación de Sociedades Científicas Médicas de Chile – ASOCIMED

Sociedad Chilena de Infectología

Sociedad Chilena de Enfermedades Respiratorias

Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología

Sociedad Chilena de Pediatría

Sociedad Chilena de Medicina Familiar